La cantidad de víctimas fatales a raíz de las inundaciones y los deslaves registrados en el noroeste de China ascendió hoy a 337, mientras que las Fuerzas Armadas locales y equipos voluntarios continúan buscando a unas 1.350 personas desaparecidas.
Unos 218 heridos, entre ellos 41 de gravedad, fueron ingresados en instituciones hospitalarias, según datos difundidos el lunes por un portavoz oficial, según reportó la agencia alemana DPA.
El domingo, las barreras propiciaron la formación de un lago que luego se desbordó e inundó la zona de Zhougu, en la provincia de Gansu. Varios edificios fueron arrasados por la corriente de unos 1,8 metros cúbicos de barro y escombros. Una tercera parte de la región quedó sepultada bajo el lodo.
Fuente: Telám