La Vicepresidenta de la nación hizo uso de su defensa propia por la causa Vialidad en la que se la acusa por ser la jefa de una asociación ilícita. El mes pasado, el fiscal Diego Luciani pidió 12 años de condena y la inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos.
El juicio contra Cristina Fernández de Kirchner continuó este viernes por la mañana y expuso pasadas las 11:30, luego de que Carlos Beraldi, abogado de la exmandataria, hiciera uso de su defensa hacia ella.
“Con los alegatos, se desmontaron las increíbles mentiras de los fiscales Mola y Luciani”, comenzó diciendo la vicepresidenta a pocos minutos del mediodía, arremetiendo contra los que solicitaron una dura condena. Asimismo, dijo que los mismos «mintieron en el alegato final de acusación«.
“Esto no es algo que graciosamente se me concede. Si no fuera porque soy abogada, hubiera estado en estado de indefensión”, manifestó Cristina.
Con sus críticas de siempre al sistema judicial del país, aseguró que “en el único ámbito dónde se desconocen las leyes es en el judicial”. «El derecho penal de autor en Argentina tiene nombre y apellido, se llama Cristina Fernández de Kirchner», lanzó.
Señalando la ‘amistad’ del fiscal de la causa con el ex presidente Mauricio Macri, Cristina manifestó: «al histriónico Luciani se le escaparon 400 llamadas de López con Caputo, el hermano de la vida de Macri, denotando una familiaridad entre ambos que ninguno de nosotros ha tenido con nadie«.
«La gente elige los gobiernos«, dijo, destacando los mandatos en donde estuvieron tanto ella como Néstor Kirchner en Santa Cruz y en el país. «No podemos haber formado nunca una asociación ilícita mientras representábamos la voluntad popular«, exclamó la vicepresidenta, argumentando que ambos «fueron elegidos por el pueblo«.
«Me da la impresión que el fiscal anduvo medio flojo en la materia de derecho administrativo. Dijo cosas que la verdad no tienen pie ni cabeza», destacó la exmandataria nacional.