Wilson Maldonado Balderrama es considerado uno de los más grandes proveedores de droga de la región. Sería extraditado a nuestro país.
Un poderoso empresario boliviano, dueño de hipódromos y dedicado a la cría de caballos, fue detenido en Santa Cruz de la Sierra. Está acusado de comandar un grupo narco en Argentina y en especial se lo responsabiliza por un cargamento de 267 kilos de cocaína secuestrados en Salvador Mazza, en Salta, en una causa en la que hay dos exconcejales detenidos.
Wilson Maldonado Balderrama, de 65 años, tenía una orden de captura con cédula roja de Interpol desde 2019 como sospechoso de ser el dueño de la droga incautada en el llamado operativo “Febrero Blanco” llevado a cabo en 2016. Los investigadores sospechan que la cocaína llegaba desde la frontera hasta Salta y desde allí “bajaba” a distintas ciudades del país, en especial a Rosario, Córdoba y Buenos Aires.
El empresario está detenido en la cárcel de Palmasola, en Santa Cruz de la Sierra, acusado de “transporte y contrabando de estupefacientes”, dijeron fuentes judiciales citadas por la agencia Telam. Fue apresado cuando se movilizaba a bordo de una camioneta en esa ciudad boliviana. En el momento del arresto no opuso resistencia.
La detención fue realizada por agentes de Interpol Bolivia y del Grupo de Reacción Inmediata (GRI) del Departamento de Santa Cruz.
Cómo fue el operativo “Febrero Blanco”
Madonado Balderrama quedó a disposición de la jueza en lo penal Esther Ocampo, a la espera del inicio de los trámites de extradición a la Argentina. El empresario está acusado por la Justicia Federal salteña de estar vinculado con el operativo “Febrero Blanco”.
En el procedimiento la Gendarmería Nacional interceptó un camión en la ruta nacional 16, en Salvador Mazza. El vehículo tenía escondidos 267 kilos de cocaína en panes que llevaban una letra W. Entonces fueron detenidos los dos ocupantes del camión y meses después la policía apresó al concejal de Salvador Mazza Alejandro Maurín, quien fue condenado a 14 años de prisión.
En tanto, otro concejal, Mauricio Gerónimo, fue acusado en la misma causa. Estuvo prófugo tres años hasta que fue detenido en abril de 2019 en Santa Cruz de la Sierra, donde residía con identidad falsa.
Segundo intento
La Justicia argentina consideró que Maurín y Gerónimo eran los líderes de la facción local de la banda narco que comandaba desde Bolivia Balderrama.
La justicia salteña ordenó la captura internacional del empresario boliviano y fue detenido en Bolivia en 2019, pero como no tenía antecedentes fue rechazada su extradición a la Argentina y excarcelado meses después.