El secretario de Salud municipal, Carlos Catalá, se refirió a las ventajas que permitió instalar el Plan Detectar en Comodoro desde hace dos meses, para evitar contagios masivos y que la gente colapse las guardias de hospitales y clínicas. Además, valoró el esfuerzo del personal municipal para llevarlo adelante y para mejorar el call center.
El Plan Detectar lleva casi dos meses instalado en la ciudad
los siete días de la semana, itinerante en distintos barrios y con tres puntos
fijos desde hace algunas semanas. El método permitió detectar con diagnósticos
rápidos a una mayor cantidad de casos positivos y aislarlos junto a sus
contactos estrechos para evitar que propaguen el virus. Si bien los casos
tuvieron un amesetamiento, se evitó un colapso del sistema de salud sobre todo
en su instancia primaria de diagnóstico.
“Lo más importante fue el hecho de
haber podido descomprimir este embudo que teníamos, porque la gente para poder
llegar al diagnóstico tenía que ser sí o si a una guardia o hacerse una pcr,
que tardaba días en arrojar el resultado”, explicó el secretario de
Salud, Carlos Catalá.
En este sentido, destacó que el método “descomprimió los hospitales, las
guardias, y la sensación es que voluntariamente la gente concurre a las sedes
del programa Detectar, aún sabiendo que es probable que uno le diga que se
tiene que aislar por 14 días junto a sus contactos estrechos. Esto nos permitió
el seguimiento de más de 10 mil personas, entre positivos y contactos
estrechos, que se debieron quedar en la casa evitando hacer circular el virus”.
CIFRAS DEL DETECTAR
“En total, desde el comienzo del Plan Detectar hace casi dos meses, hubo 5200
personas aproximadamente detectadas como positivas, a los cuáles se suman los
contactos estrechos familiares y laborales que han podido aislarse”, reconoció
Catalá como uno de los puntos más importantes.
A su vez, el funcionario resaltó la importancia de haber instalado puntos fijos
desde hace algunas semanas: “Las sedes de Castelli, San Cayetano y
Escuela de Arte permitieron que, territorialmente, la gente pudiera acceder lo
más cerca de la casa posible, y eso nos dejó otras 1800 personas diagnosticadas
como positivas”.
En ese marco, valoró la función del personal municipal, tanto de la Secretaría
de Salud, como de otras áreas que aportaron personal para colaborar con la
pandemia. “La mayoría de las personas que están trabajando en Castelli y la
Escuela de Arte son de la Secretaría de Salud Municipal y voluntarios de la
UNPSJB”.
EL APORTE MUNICIPAL
AL CALL CENTER
“También pudimos avanzar en una situación en la que teníamos más de 3 mil
llamados pendientes entre los cuales había diagnósticos con médicos privados o
laboratorios que quizás no cargaban el dato en el SISA (Sistema Integrado de
Información Sanitaria Argentino) y eso hacía que nosotros no pudiéramos tener
el dato, ni la ficha epidemiológica, ni la declaración jurada, y por ende, no
podíamos hacerle ni el diagnóstico ni el seguimiento, ni el aislamiento de
contactos estrechos”, recordó.
A partir de esa situación, “ahora tenemos un call center con aporte de
distintas secretarías, junto a la UNPSJB, con más de 200 personas que están
desde el inicio del diagnóstico, hasta el seguimiento y el alta del paciente. Esto
generó más tranquilidad a la población porque de los 3 mil llamados hoy no
tenemos demora con ninguno”, destacó Catalá.