La ciudadana Mirtha Rosa Soria escribió unas líneas destinadas a la comunidad de Comodoro Rivadavia, apuntando a la estigmatización que sufren las 1.008 viviendas de un tiempo a esta parte con relación a sus pobladores y la posible vinculación con hechos del hampa local. Texto completo.
“Desde hace bastante tiempo, el barrio 30 de octubre donde vivo, ha sido eco de ‘exclusión’. Frecuentemente, los centros comerciales se han negado a llevar lo que hemos comprado (heladera, lavarropa, etc.), a nuestros domicilios. En respuesta me aducen que “para las 1.008 no hay reparto.
Yo, como ciudadana adulta mayor, me siento excluida por no decir discriminada, de tal situación. Sé que en mi barrio hay gente muy laburadora, como gente que no y amiga de lo ajeno. Pero, ¿por qué tenemos que pagar ese juicio nosotros? No tan sólo los centros comerciales nos dan esa respuesta, sino que también las empresas prestatarias de servicios se acoplan a esas medidas.
¿Cómo hacemos los que religiosamente abonamos los impuestos y pagamos los servicios, para vivir dignamente. Qué tenemos que hacer para que nos tengan en cuenta. Qué tenemos que hacer para que sepan que los que nos matamos laburando tenemos derechos, y los jubilados como es mi caso, nos sentirnos desprotegidos como lo estamos actualmente?
Quiero hacer énfasis particularmente, a la mirada que tienen las empresas que prestan el servicio de internet, hacia el barrio 30 de octubre. Actualmente y en un contexto de pandemia, estamos necesitando vivir con herramientas virtuales para el colegio, trámites, sacar turnos, etc. Yo, como jubilada, me tuve que informar e instruirme con ésta nueva tecnología. Pero ¿qué pasa? Las empresas de internet no quieren o no pueden, o no sé… llevar a “las 1.008” este servicio. Sé que hay personas en el barrio que lo tienen, pero ya hace un tiempo las empresas no prestan sus servicios al barrio.
¿Qué tenemos que esperar. Qué hace el Gobierno para que no pase esta exclusión de la que somos víctimas, los que realmente nos ganamos el pan con honradez y dignidad?
Ojalá alguien del Gobierno, nos dé respuestas a los ciudadanos que no salimos a delinquir, y que nos ganamos el pan laburando. En el barrio 30 de octubre no son todos delincuentes. Por favor, a no excluirnos de la sociedad”.
