A la par de la difusión del dato de inflación del último mes, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que el índice de Canasta básica total de febrero subió un 15,8% en comparación con el mes anterior. De este modo, una familia tipo necesitó $ $690.900 para no ser pobre en ese periodo.
En tanto, la Canasta básica alimentaria, la que marca el umbral para no caer en la indigencia, subió 13,1% y una familia necesitó 322.851 para atender las cuestiones elementales de alimentación.
En enero, la Canasta básica total había subido 20,4% y una familia tipo había necesitado $ 596.823,18 para no ser pobre. Para no ser indigente el mismo grupo de dos adultos, un hijo y una hija precisó $ 285.561 para no caer en la indigencia.
El dato se conoce horas después de que el Gobierno anunciase la apertura de importaciones para productos de la canasta básica, tras la reunión que mantuvo en las últimas horas el ministro de Economía, Luis Caputo, con supermercadistas.
«Se tomó la decision de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar en pos de hacer los precios más competitivos con alguna quitas de impuestos», indicó el vocero presidencial, Manuel Adorni en conferencia de prensa.
El Ministerio de Economía precisó que los productos afectados serán: banana, papas, carne de cerdo, café, atún, productos de cacao, insecticidas, shampoos, pañales, entre otros.