El Bloque Cambiemos presentó un proyecto de ley para que en las próximas elecciones en Chubut exista la boleta única. El modelo será diseñado por el Tribunal Electoral y habrá una audiencia pública para que los apoderados de los partidos la analicen. Córdoba y Santa Fe ya aplican el sistema.
La iniciativa especifica minuciosamente cómo aplicar el sistema. Respecto a la confección manifiesta que será el Tribunal Electoral Provincial quien realice el modelo y será una boleta para cada categoría de cargos electivos.
Deberán ser “legibles, impresas en idioma español, en papel no transparente y contendrán la indicación gráfica del plegado. Las boletas de cada categoría serán de diferentes colores”. En cuanto al tamaño, dependerá de la cantidad de listas oficializadas en cada elección. Y tendrán un código de seguridad.
Añade que “contendrán, para la elección de todas las categorías electivas provinciales, los nombres de los candidatos titulares y sus respectivas fotos. En todas las boletas se consignará: el número de orden asignado; logo o símbolo partidario; denominación utilizada por el partido político, alianza o confederación política; nombre y foto de los candidatos”. A su vez, las boletas incluirán un casillero con la opción de voto en blanco.
Deberán integrarse en talonarios por categoría, los cuales serán enumerados correlativamente. Tanto en el talón como en el cuerpo de la boleta deberá constar la información relativa al departamento, circuito, número de mesa a la que se asigna y la elección a la que corresponde. También habrá un casillero para que el Presidente de mesa estampe su firma al momento de entregarla al elector.
Además, las listas con candidatos deberán ser exhibidas públicamente en afiches o carteles de exposición obligatoria en los centros de votación.
Audiencia de aprobación
La normativa también prevé la existencia de una audiencia pública para aprobar el modelo de boleta única. El Tribunal Electoral, una vez firme la resolución de oficialización de listas, convocará a los apoderados de los partidos, alianzas o confederaciones políticas, previa notificación fehaciente. En la audiencia se aprobarán símbolos partidarios, denominación, fotografías de candidatos entregadas y demás requisitos previstos.
El orden de cada partido o alianza será asignado por sorteo público. Una vez firme la resolución, los partidos, alianzas y confederaciones políticas tendrán un plazo de tres días para revisar los cambios o las modificaciones. Vencido este plazo, y ante el incumplimiento de las modificaciones exigidas, en la boleta se incluirá sólo la denominación del partido, dejando en blanco los demás requisitos.
Diseño para no videntes
El Tribunal Electoral Provincial dispondrá la confección de plantillas de cada boleta única en papel transparente y alfabeto Braille para colocar sobre la boleta única de sufragio y con ranura sobre los casilleros para ejercer la opción electoral. Asimismo habrán boletas únicas suplementarias que serán utilizadas en casos de robo, hurto, pérdida o rotura.
Entrega de la boleta al elector
La ley especifica que el Presidente de Mesa entregará la boleta única conjuntamente con un bolígrafo indeleble. En el cuarto oscuro, el elector marcará la opción electoral de su preferencia con una cruz dentro de los recuadros impresos y luego la depositará en la urna. Posteriormente firmará el padrón y se le otorgará el talón troquelado.
Finalmente estipula que el Tribunal Electoral deberá brindar las capacitaciones correspondientes para el buen uso de la boleta única.
Entre los fundamentos expresa que “las actuales boletas propician el llamado ´efecto arrastre´: el votante se concentra en la categoría que considera más relevante -presidente o gobernador, por ejemplo-, votando a los candidatos para el resto de las categorías sin prestar mayor atención a quiénes son los postulantes”.
A su vez cuestiona que con el actual sistema se favorece “el ocultamiento, robo o destrucción de boletas dentro de los cuartos oscuros; el reemplazo de boletas -falsificadas- de un partido por otras similares con el objeto de generar votos nulos. Y aunque no sucediera ninguna de estas prácticas, siempre es posible que falten boletas por ausencia de reposición o de fiscalización adecuada. Tampoco es menor el detalle de la contaminación visual a la que se expone al ciudadano que al entrar al cuarto oscuro debe buscar su opción electoral y seleccionarla entre decenas de papeletas disponibles”.
La boleta única “permite al elector identificar más fácil y rápidamente en qué tipo de elección vota, y por cuáles partidos y candidatos; facilita también el voto de los no videntes en tanto se puede prever la confección de plantillas en alfabeto Braille, que se colocan sobre la boleta de sufragio. Asimismo, transparenta y agiliza ostensiblemente el escrutinio”.
Para concluir resalta el ahorro “al simplificarse en extremo la impresión de la boleta, que se calcula estrictamente, en razón de la cantidad de electores”.