“Breaking Bad” tuvo 62 episodios a lo largo de cinco temporadas y, tras su final el 29 de septiembre de 2013, logra mantenerse firme en todos los ránkings en los que críticos y medios especializados consagran periódicamente a “las mejores series de la historia”.
“El Camino: Una película de Breaking Bad”, cinta que da continuidad a la popular serie que relataba la historia de cómo un profesor de química y su ex alumno se metían de lleno en el negocio del narcotráfico “cocinando” metanfetaminas, estrenará mañana a través de la plataforma de Netflix.
Suele estar ahí, cabeza a cabeza en las clasificaciones con “Los Soprano”, a partir no sólo de la inmensa popularidad que llegó a acumular sino sobre todo por sus contribuciones a la narrativa televisiva, en especial al desafío del arquetipo establecido de lo que es un héroe y lo que es un villano.
La serie seguía a Walter White (Bryan Cranston) y a Jesse Pinkman (Aaron Paul), quienes atravesaban un sinfín de peligros y adversarios mientras se adentraban en un mundo para el que no estaban preparados.
Su creador, Vince Gilligan, vuelve a escribir y dirigir esta película de 122 minutos que retoma la trama de Jesse justo donde el espectador lo dejaba en la serie, recuperando su libertad y encarando el asfalto a bordo de un Chevrolet El Camino rumbo a un futuro incierto.