Boca sufrió las bajas de Marcos Rojo y momentáneamente de Nicolás Figal por sendas lesiones que demandarán un tiempo de recuperación.
Además, Carlos Zambrano fue limpiado del plantel por mala conducta y ya firmó con Alianza Lima de Perú su nuevo contrato.
Así, Boca había quedado con un fondo con muy poca experiencia y rodaje en primera, por lo que el Consejo de Fútbol decidió ir en busca de nuevas caras para la defensa.
Las negociaciones fueron por Barreto de Independiente, que pidió una cifra elevada para el criterio del Xeneize. Lucas Merolla de Huracán también era inalcanzable desde las pretensiones del Globo.
Por ello Boca terminó inclinándose por jugadores que no estaban en el radar de nadie en principio, ambos con experiencia en sus selecciones y la misma edad: 30 años.
Uno de ellos es Alexander Callens, peruano que integra hace años la selección de su país y compartió zaga con Carlos Zambrano y línea con Luis Advíncula. Actualmente se encontraba en la Major League Soccer de Estados Unidos pero quedó libre y su firma con el Xeneize estaría al caer.
Cuando cayó el bombazo del nuevo refuerzo de los de Ibarra, cayó el segundo: Bruno Valdez, paraguayo dirigido por Guillermo Barros Schelotto en el combinado albirrojo.
Valdez militaba en el América de México, donde estuvo durante más de siete años. Quedó libre pese a ser un referente de las Águilas aztecas y el defensor con más goles en la historia del club.
La idea de Riquelme es que ambos estén entrenando lo más pronto en el predio de Boca junto a los que no viajarán a Dubai a disputar la Supercopa Argentina contra Racing.
En las próximas horas se realizarían la revisión médica y estamparían la firma para vestir la camiseta del “Único Grande”.
