En febrero fueron baleados José Héctor Raimapo y su hijo Richard. Días más tarde falleció el padre, lo que acrecentó el conflicto entre las familias.
El conflicto que mantienen integrantes de la familia Raimapo y Cheuque, que ya se cobró la vida de uno de ellos, continúa sin dar tregua y pese a la constante presencia policial y de grupos especiales en el sector los ataques no cesan, de manera que la noche del jueves un nuevo hecho tuvo lugar, comienza describiendo Diario Crónica en su publicación.
Alrededor de las 23:45 de ayer horas personal del Centro de Monitoreo recibió llamados que indicaban que en calle 651 y 703 se estaba produciendo una balacera, de manera que una comitiva de Seccional Sexta de Policía se hizo presente en el lugar y se corroboró que la vivienda de una mujer había sido baleada.
En el lugar se secuestraron un total de 17 vainas servidas, lo que da cuenta de la cantidad de disparos que se efectuaron, pero solamente uno habría ingresado en la vivienda sin lesionar a ninguna persona por fortuna, dado que la violencia con la que se ejerció el ataque podría haber terminado con víctimas.
La funcionaria de fiscalía de turno Andrea Serer tomó intervención en el hecho y se dispuso que actuara personal de la División Policial de Investigaciones para dilucidar a los autores del ataque, mientras que desde Criminalística procedieron al levantamiento de las vainas y a la concreción de la secuencia fotográfica.
UNA MUERTE Y NINGUNA DETENCIÓN
El conflicto entre las partes, quienes resultan ser familiares entre sí, viene de vieja data y el 14 de febrero pasado un grave hecho se dio cuando en el campo de jineteada los grupos mantuvieron un pleito que terminó haciendo que se retiraran del lugar. De esta forma cuando José Héctor Raimapo de 43 años retornaba a su vivienda en calle Código 651 al 2.100 junto a su hijo Richard de 24, ambos fueron baleados, siendo trasladados al Hospital Regional.
La peor parte la tuvo el padre dado que recibió un disparo en la zona de la espalda y tras ser intervenido quirúrgicamente el 4 de marzo falleció incrementando la hostilidad entre las partes.
Poco después familiares directos del hombre realizaron una movilización al Ministerio Público Fiscal solicitando que sean detenidos los autores del hecho y que les brinden seguridad dado que constantemente eran amenazados, disponiéndose patrullajes preventivos en la zona.
Sin embargo, respecto al esclarecimiento del caso, aún no hay imputados ni detenidos y continúan los conflictos.
