Un informe de la entidad que nuclea a las concesionarias dio un panorama respecto del esfuerzo que representa para un trabajador con un haber promedio llegar a un vehículo de los considerados pequeños. La cifra de sueldos que se requieren viene aumentando sostenidamente desde hace dos años.
A lo largo de 2021, y de la mano de la reactivación del consumo y la actividad económica, el mercado automotor experimentó un incremento del precios a un ritmo superior al de la inflación promedio y de la evolución del tipo de cambio entre el peso argentino y el dólar estadounidense.
Como consecuencia de esa disparada de los valores de venta, que continuó en los primeros meses de 2022, en abril último un trabajador necesitó de al menos un monto equivalente a 36,2 meses de salarios para poder comprar un vehículo cero kilómetro.
Según reveló un informe elaborado por la Asociación de Concesionarias de Automotores (Acara), para realizar el calculo se tomaron en cuenta el precio de un modelo de automóvil chico que en abril fue $2.687.809 y un sueldo promedio de $74.295, en base a la Ley de Contrato de Trabajo.
En abril, el valor promedio del 0 Km registró un incremento del 5%, similar al alza de precios que se viene dando en la industria en los últimos dos años, y que en la mayoría de los casos va por encima del índice de variación de precios minoristas que mide el Indec.
Si bien en lo que va de 2021 el sector acompañó en promedio el alza de precios del resto de la economía, de acuerdo a Acara, en los últimos 12 meses móviles el valor del modelo de referencia tomado para el cálculo marcó un incremento del 71%, mientras que en los sueldos el acumulado hasta marzo pasado -de acuerdo con el Indec- fue del 55,1%.
Fuerte aceleración inflacionaria
Fuentes del nucleamiento de las concesionarias explicaron que, en lo que va de este año, en enero se requerían 31,5 sueldos para la compra de una unidad 0 Km, en febrero 32,8 salarios y en marzo 34,5 haberes, acompañando la aceleración inflacionaria.
En consecuencia, la necesidad de ahorro de un asalariado se incrementó en un 38% en los últimos meses, de acuerdo al relevamiento de cifras de la entidad que nuclea a las concesionarias oficiales de todas las marcas.
La evolución de esta variable se hace más notoria al tomar el período de los últimos 24 meses, ya que en abril de 2020 eran necesarios 17 salarios promedios para llegar a un 0 Km, es decir menos de la mitad de lo que se requiere ahora.
Para comparar el nivel de aceleración actual en los precios del sector automotor en los últimos tres meses, se destaca que el ticket promedio de un vehículo nuevo pasó, según precios de lista, de $2.437.922 en febrero, a $ 2.559.818 en marzo, y a $ 2.687.809 en abril.
En el mismo trimestre móvil, el tipo de cambio oficial evolucionó un 4% y un 26% en los últimos 12 meses; mientras que el tipo de cambio paralelo lo hizo en un 2% y un 44% respectivamente.
¿Qué dicen desde las fábricas?
Fuentes de las terminales nacionales explicaron, por otro lado, que la industria viene incrementando sus precios mes a mes entre 4 y 7% según la gama de los modelos.
En ese sentido, el presidente de una de las marcas de mayor venta del mercado local explicó que no sólo hay que tomar como referencia la evolución del dólar -ya que si bien modelos que se producen en el país tienen gran integración de partes importadas- sino que en el último año se viene registrando un incremento de insumos y logística.
Al respecto puso como ejemplo el salto exponencial de algunas materias primas como el aluminio que multiplicó su valor internacional desde mediados del año pasado en una tendencia formada por la suba de la demanda por el incremento productivo tras el pico de la pandemia y que se profundizó por efecto de la guerra en Ucrania.
Algo similar viene ocurriendo con la logística, para lo cual se toma como referencia el aumento exponencial que tuvo el costo del contenedor, un costo agregado ya sea a la importación de vehículos terminados como de las autopartes que requiere toda la industria.
A esto se sumó la pandemia que también se hizo sentir en la caída de la oferta y el alza de precios en los semiconductores -presentes en todos los vehículos de crecientes componentes electrónicos y digitales-, que hizo que los productores se volcaran al segmento de alta gama, por encima de los chips menos avanzados.
En fin, más allá de las diversas explicaciones, lo cierto es que de continuar aumentando los precios al ritmo que vienen haciéndolo, en poco tiempo el mercado comenzará a debilitarse dado que cada vez son menos los que están en condiciones de afrontar la compra de un vehículo 0 kilómetro.