Este lunes a la madrugada un remisero de 53 años recibió una decena de puntazos con un arma blanca. El asesino simuló ser un pasajero, apuñaló al chofer del remís e intentó prender fuego el cadáver.
Según publicó ADNSUR el hecho ocurrió en la ciudad de El Calafate, Provincia de Santa Cruz.
Héctor Fabián Esponda recibió una decena de puntazos con un arma blanca. El asesino intentó borrar la escena del crimen. Según trascendió, detuvieron a un hombre de 34 años y allanaron su casa. La víctima vivía hace 8 años en la localidad de E Calafate y trabajaba para la empresa de viajes Lago Argentino.
Cerca de las 2.30 de la madrugada de este lunes, Héctor Fabián Esponda (53) recibió un llamado mientras manejaba el remís. Según la primera hipótesis, el asesino se habría comunicado al teléfono particular del chofer simulando ser un pasajero que requería un viaje.
Todo indicaría que tras subirse al auto y pedirle que maneje hasta una zona de pasajes ubicada en el barrio Manantiales, el asesino sacó un arma blanca y le dio al menos diez puntazos en distintas zonas del cuerpo a la víctima.
Luego, para evitar dejar rastros, el asesino dejó el cuerpo bañado en sangre en la parte trasera del auto, un Chevrolet Corsa, e intentó incendiarlo. Sin embargo, alertados por los vecinos, al lugar llegaron los bomberos y luego de evitar que las llamas se propaguen hallaron el cadáver del hombre.
Un joven de 36 años fue detenido y la teoría que más resuena es un supuesto ajuste de cuentas. Esponda habría dejado cuentas sin pagar, motivo por el cual se habría ocasionado una diferencia irreconciliable que derivó en el crimen.