Poco a poco, Lewis Hamilton comienza a despedirse de la escudería Mercedes. En conferencia de prensa,el piloto británico, que el próximo año correrá con Ferrari,contó que esta fue una temporada muy particular en la que tuvo que lidiar con muchas cosas y con gente a la que no le gustó su decisión.
“La primera reunión con Toto Wolff al inicio del año fue extraña. El día después del anuncio me llevé al equipo a jugar al paintball y me dispararon mucho, se cebaron conmigo (risas). Pensé que iba a ser difícil, pero subestimé lo complicado que fue.Puso mucho estrés en nuestra relación”, señaló Hamilton.
“La gente necesitaba tiempo para superarlo, y para mí también fue un año muy emotivo. No lidié con esas emociones lo mejor posible”, afirmó.
“Soy humano y los humanos fallan, pero es cierto que en un futuro lo intentaré hacer mejor. Espero que lo bueno compense lo negativo. Recordaré los buenos momentos y las relaciones que desarrollé a lo largo de los años, porque no solo son los fines de semana, sino también su vida privada, con bodas, enfermedades, divorcios, hijos, etc.”, indicó el inglés.
Luego, habló de lo que será esta última carrera con su actual equipo, antes de pasar a Ferrari: “Ahora estoy pensando en terminar de la mejor manera posible con Mercedes, estos días van a ser muy emotivos, y hay muchos interrogantes sobre lo que me deparará el año que viene, aunque lo voy a afrontar con mucha emoción, con ganas”.
Por último prefirió no responder cuando intentaron compararlo con Michel Schumacher: “No busco compararme con Michael, no es algo que quiera”.