Se trata de uno de los buques de carga más grandes del mundo, que acabó atravesado en mitad del Canal de Suez, impidiendo el paso de al menos 180 embarcaciones en uno de los pasajes estratégicos más importantes del mundo.
El Ever Given, un gigantesco buque carguero con bandera panameña, lleva días bloqueando por completo el tránsito en ambos sentidos de lo que es una de las vías de comercio marítimo más importantes a nivel mundial. Por razones que no se han terminado de esclarecer, el barco acabó atravesado en mitad del Canal de Suez el pasado martes. La nave, de casi 400 metros de largo y 59 de ancho, y capacidad para transportar 20.000 contenedores, se cuenta entre los buques de carga más grandes del mundo.
De acuerdo con lo informado por medios internacionales, alrededor de 180 embarcaciones permanecen encerradas en la red del canal, por donde pasa aproximadamente el 12% del comercio mundial.
En circunstancias normales, unos 50 barcos lo atraviesan cada día cargadas de bienes tan diversos como petróleo, alimentos, ropa, coches o ganado. Se estima que el Ever Given está bloqueando el tráfico de mercancías por valor de 9.600 millones de dólares cada día que pasa. Cuanto más tiempo dure la situación, mayor será el impacto en el comercio mundial.
Las causas que llevaron al encalle del Ever Given no están del todo claras. Las autoridades del canal hablan de una maniobra indebida por una combinación de fuertes vientos y mala visibilidad por una tormenta de arena. Pero hay un detalle que está llevando a algunos a especular con que igual el accidente no fue tan fortuito.
Los datos posicionales recogidos por la red AIS global y disponibles en tiempo real a través sitios como MarineTraffic o VesselFinder muestran que el carguero siguió una trayectoria muy atípida en las horas previas a enfilar el canal. Su ruta, totalmente caprichosa y contraria a la lógica del transporte marítimo, parece dibujar la forma de un pene gigante y también a un par de nalgas. ¿Estaba avisando de algo?
