El ex vicepresidente Amado Boudou se retiró del complejo penitenciario de Ezeiza a bordo de un automóvil Peugeot de color blanco, pero se detuvo para hablar con los periodistas lo esperaban: «En lo personal siento alegría pero a la vez no puedo porque hay presos políticos, hay un abuso de la prisión preventiva. Voy a seguir defendiendo mi inocencia», aseguró tras prometer que no va a abandonar la lucha por los «compañeros» que siguen encarcelados.
La emoción lo superó cuando -en diálogo con Víctor Hugo Morales por C5N– fue consultado sobre cómo va a pasar la Navidad: «Con mis dos niños y con mi mujer», alcanzó a responder con la voz entrecortada y sin poder contener las lágrimas. Luego se retiró rumbo a su domicilio.
Condenado a cumplir una condena de cinco años y 10 meses de prisión por el caso Ciccone, Boudou tiene prohibido salir del país y tendrá que usar una tobillera electrónica con GPS: no podrá alejarse más allá de 100 kilómetros a la redonda de su casa, según la resolución del Tribunal Oral Federal 4.
Las juezas María Gabriela López Iñíguez y Adriana Palliotti beneficiaron al ex funcionario con la excarcelación, al considerar que no hay riesgo de fuga. Distinto fue el fallo de Néstor Costabel, quien se opuso a la liberación.
Para solicitar la excarcelación, la defensa del ex funcionario, integrada por los abogados Alejandro Rúa y Graciana Peñafort, había sostenido que la resolución adoptada la semana pasada por el juez Ariel Lijo en la causa que investiga la ruta del dinero para comprar la imprenta quebrada despejaba las sospechas de que Boudou pudiera perjudicar la investigación.
La defensa de Boudou usó los argumentos que el propio Lijo sostuvo para no disponer prisiones preventivas en los procesamientos del ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray y la ex jefa de la Casa de la Moneda Katya Daura –según publica Infobae-.
«Actualmente no observo de qué manera podrían entorpecer la investigación», pues «a esta altura entiendo que ya se han desarrollado todas aquellas medidas más relevantes y conducentes al esclarecimiento del hecho investigado, de manera tal que los imputados no podrían desarrollar, en esta instancia, comportamiento alguno que comprometa el éxito de la investigación», afirmó el juez, según citó el escrito de la defensa de Boudou.
Boudou estaba preso en la cárcel de Ezeiza desde agosto. El Tribunal Oral Federal 4 lo condenó a 5 años y 10 meses de prisión por los delitos de cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública en la venta de ex Ciccone. La sentencia no está firme porque la defensa apeló a la Cámara Federal de Casación Penal. Pero los argumentos del juez Lijo en el fallo del viernes reactivaron los pedidos de libertad para el ex vicepresidente, que se hará efectiva en las próximas horas.