La moda circular viene pisando fuerte y ya llegó hasta la alfombra roja donde muchas famosas lucen orgullosas vestidos vintage que ya han tenido varios usos o repiten un modelo que tenían dentro de su propio vestidor y hace mucho tiempo que no veía la luz.
A esto se suma que la difícil situación económica no pasa desapercibida para nadie y que, a la hora de invertir en un vestido de fiesta de estreno, hay que pensar en un número con varios ceros. Esto último no solo sucede en Argentina: las marcas de lujo internacionales han subido muchísimos los precios de sus colecciones.
Es evidente que, ante este contexto, alquilar un vestido de fiesta no solo es una tendencia sino que es una actividad que se da en el momento justo. Vanina Coluccio percibió junto a unas amigas este fenómeno y crearon Total Dress, un emprendimiento que ofrece alquilar más de 300 modelos a puro brillo para una noche de fiesta y que funciona en un showroon de Caballito donde los modelos se lucen en largos percheros, uno al lado del otro.
“Pensamos mucho en esto primero porque es sustentable, circular y luego porque alquilar un vestido de fiesta tiene por supuesto, otro costo. Acá podés conseguir un vestido entre $59.000 y $63.000, cuando uno nuevo sale entre 1 millón doscientos y 1 millón quinientos”, le cuenta la emprendedora a TN. “Además podés alquilar los complementos como zapatos o sandalias, un sobre o clutch y un saquito de piel ecológica como complemento, todo impecable de tintorería y en perfecto estado. Un total look se consigue por $100.000”, explica Coluccio.
Los vestidos que ofrece Total Dress son traídos de Estados Unidos y Europa, aunque también hay modelos de marcas locales muy famosas. “Lo elegís según lo que necesites, hay vestidos para madrinas, para la mejor amiga de la novia, para la mamá de la chica que cumple 15. Todo depende de para qué rol lo necesitas en la fiesta que tengas. Acá te probas, te asesoramos y te armamos todo el look”, continua.
Un dato no menor es el tema de los talles que muchas veces genera conflicto en el mercado de la moda. “Tenemos todos los talles, variedad absoluta, desde el XS hasta el XXL”, concluye Vanina Coliucci mientras corre a atender el portero eléctrico para entregarle a una clienta un vestido de fiesta soñado y… accesible.
