Un vecino relató cómo efectivos policiales armados ingresaron a su vivienda rompiendo la puerta y el portón. Armados y a los gritos, desataron el pánico de los habitantes de la casa, entre los que se hallaba su hija de 8 años. A pesar de su explicación, le dieron vuelta todo y denuncia que nadie se hace cargo por el error.
Walter Godoy vive en el Máximo Abásolo y en las últimas horas vivió momentos de terror cuando efectivos policiales ingresaron por la fuerza a su vivienda en el marco de un allanamiento en busca de una persona que hace dos años dejó de vivir en esa dirección.
Rompiendo la puerta y el portón, los policías ingresaron armados y a los gritos desatando el pánico de Walter, su esposa y su pequeña hija de 8 años, siendo todos reducidos.
A pesar de su explicación de que la persona que buscaban no vivía ahí, los efectivos revisaron toda la casa y ahora el vecino exige que alguien se haga cargo de todo lo que rompieron.