El candidato a presidente por la Unión para el Desarrollo Social (Udeso), Ricardo Alfonsín, expresó públicamente su apoyo al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, de cara al balotaje en la Ciudad de Buenos Aires, y no descartó la posibilidad de convocarlo «luego de las elecciones primarias» que se celebrarán el 14 de agosto.
Alfonsín destacó «la actitud humilde» que tuvo Macri, trasimponerse de manera contundente en la primera vuelta electoral de la Ciudad. «Si fuera porteño votaría a Macri», admitió el candidato radical en declaraciones formuladas anoche a la señal de cable Todo Noticias. Además, el diputado nacional explicó que con las elecciones porteñas «quedó claro que todo esto que se dice del oficialismo y todas las encuestas que las pagamos nosotros, con nuestros impuestos, para hacer publicidad al gobierno, se han equivocado feo».
Además, consideró que el resultado significa «un límite» para la administración de la presidenta Cristina Kirchner y vaticinó que «van a venir escenarios» políticos que modificarán «el clima triunfalista» del oficialismo. El dirigente radical elogió que Macri «no tuvo una actitud triunfalista» tras imponerse a Daniel Filmus en la primera vuelta electoral porteña, sino que se mostró de un modo «humilde» frente al resultado.
«Hace falta humildad en la Argentina. (Macri) tuvo una actitud de diálogo con respecto a quienes no lo votaron y celebró eso más allá de las diferencias. Creo que sí se nacionalizaron las elecciones de la ciudad» dijo Alfonsín. Al ser consultado sobre si podría llegar a un acuerdo con Macri a futuro, el candidato opinó que el 14 de agosto, cuando se realicen las elecciones primarias, «la sociedad» tendrá «la posibilidad de elegir quienes están en mejores condiciones de llevar adelante la reparación del daño que ha sufrido la República».
«Y luego de ese 14 de agosto, con independencia de lo que decidan las fuerzas políticas, la sociedad va a concentrar el voto en quienes tengan más posibilidades de ganar. La campaña (electoral) empieza ahora, y van a venir escenarios políticos que van a modificar ese clima triunfalista» del kirchnerismo, concluyó.