Alberto Fernández se mantiene firme en la idea de que es posible unas Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) donde él, como Presidente, pueda tener una competencia interna en el Frente de Todos. Dijo que “no es raro” y que “se ve” disputando con otros adversarios que pertenecen a la coalición oficialista.
“Si, me veo en las PASO. Todo es raro hasta que ocurre alguna vez”, declaró el mandatario en una breve entrevista en la Casa Rosada, en medio de las tensiones con el kirchnerismo que reclama que baje su candidatura. En defensa de esa hipótesis, planteó que “es un gesto republicano que quien quiera ser candidato pueda someterse al escrutinio público”.
Para justificar sus deseos de ir por una reelección, a pesar de las resistencias internas en el Frente de Todos, puso como ejemplo la decisión del ex presidente Néstor Kirchner en apoyar a Cristina Kirchner en 2007, cuando se presentó por primera vez como candidata presidencial. “Era raro que un Presidente proponga que su esposa sea la candidata que lo suceda. Y ocurrió. Y Argentina evidentemente no le fue mal (con ella)”, ilustró Fernández, en un intercambio para el canal C5N.
El comentario de Alberto Fernández se produjo pocos minutos después que diera otro reportaje ayer por el mismo medio de comunicación, donde el Presidente aseguró que su principal aspiración política no es ser reelecto sino que “gane el Frente de Todos”.
“Pido por favor que no vote a la oposición. De La Rúa y Macri eran cambios e hicieron estallar a la Argentina. Nosotros podemos tener diferencias pero no son en lo sustancial”, comentó entonces. “Si yo soy una buena opción seré yo y si hay una mejor opción, será otra”, insistió.
Alberto Fernández da su discurso frente a la Asamblea Legislativa (REUTERS/Tomas Cuesta)
El jefe de Estado cree que las PASO es un buen mecanismo para resolver los desacuerdos políticos y dejar atrás errores que hubo en otras elecciones, como los comicios legislativos de 2021. “Vi lo que nos pasó en 2021 que muchos dejaron de participar y cuando uno queda excluido de las PASO se pone en contra”, recordó.
“Si (Juan) Grabois quiere ser candidato, bienvenido; si Wado (de Pedro) quiere ser candidato, bienvenido; si Sergio (Massa) quiere ser candidato, pues bienvenido Sergio; si Coqui (Capitanich) quiere ser candidato, bienvenido. ¿Cuál es el problema?”.
En el breve reportaje que se emitió este sábado, Alberto Fernández volvió a expresar su malestar de que haya dirigentes del Frente de Todos que lo cuestionan abiertamente, entre ellos, el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés ‘Cuervo’ Larroque.
“Las críticas le sirven a la oposición. Perón decía que cuando un compañero empieza a hablar de otro, es que se está pasando al otro bando”, rememoró. “Acordemonos de eso -continuó. Toda crítica es valiosa y respetable, lo que sí digo es que mejor es hacerlas a puertas cerradas porque le das de comer a otros”.
Aunque el jefe de Estado y sus colaboradores abiertamente plantean que sigue en carrera, en la Casa Rosada la sensación que parece imponerse es que Alberto Fernández ya no tiene chances de ser un candidato competitivo. Lo que le resta es apoyar a un candidato y mantenerse a flote hasta el final del mandato.
El presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner asisten a la apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional de Argentina, en Buenos Aires. March 1, 2023. REUTERS/Tomas Cuesta NO RESALES. NO ARCHIVES
Larroque es el dirigente que encarna la mirada más descarnada sobre las posibilidades del mandatario: “Me parecen raras esas alquimias que a veces se plantean de ‘vamos a ganar con un candidato que mide 5 puntos’”, dijo hace días en referencia a Fernández.
Mientras la gestión sigue su curso, el kirchnerismo más duro redobla la presión para que Alberto Fernández se baje. En contraste, impulsan la candidatura de la vicepresidente Cristina Kirchner. El próximo 11 de marzo este operativo clamor se convertirá en realidad. Ese día, con el eslogan “Luche y vuelve”, distintos sectores de la militancia del Frente de Todos se reunirán en un plenario en Avellaneda para pedir que su jefa política intente presentarse para su tercera presidencia. La convocatoria remite al fin de la larga proscripción electoral de Juan Domingo Perón y a la victoria electoral de Héctor Cámpora, que le abrió las puertas para su tercer mandato en 1973.