Los gremios aeronáuticos se negaron a escuchar la propuesta salarial formulada por Aerolíneas Argentinas en la negociación paritaria del período 2018/2019, informó la compañía de bandera en un comunicado.
En línea expresó que «en una nueva escalada de enfrentamiento con la empresa, los dirigentes gremiales se negaron siquiera a escuchar la propuesta de incrementos elaborada».
Según Aerolíneas la oferta incluía «una suma fija y un porcentaje de ajuste de los salarios, la apertura de discusiones sobre una organización laboral que haga más competitiva a la empresa y el acuerdo sobre un mecanismo de resolución de conflictos. Sin embargo, de manera intempestiva, los dirigentes gremiales se negaron a escuchar la propuesta».
El encuentro con los sindicatos que agrupan a los trabajadores de Aerolíneas se concretó en la sede de la empresa, en el aeroparque. Por el Frente Aeronáutico estuvieron representantes de los gremios de pilotos (APA y UALA) y personal de tierra (APTA, UPSA y APA).
La reunión había sido prevista luego del encuentro del lunes 3, durante la cual el presidente de la empresa, Luis Malvido, recibió a los delegados y en la que se pactó iniciar conversaciones.
La propuesta que Aerolíneas intentó presentar a los gremios incluía «una oferta consistente de ajuste salarial de cara a la paritaria que debe regir desde el 1° de octubre. Incluía una suma fija a pagar con los sueldos de diciembre y un ajuste porcentual posterior, buscando preservar el poder adquisitivo de los trabajadores», precisó la empresa.
Además -agregó-, buscó «abrir con urgencia una mesa de diálogo sobre nuevas formas de organización laboral y de interpretación de las normas y pautas de trabajo que permitan mejorar la competitividad empresarial».
Ello -dijo Aerolíneas- es «un paso imprescindible ante los actuales cambios tecnológicos, organizativos y de mercado».
Asimismo, luego de las seis medidas de fuerza de los sindicatos que representan a sus trabajadores durante noviembre, Aerolíneas quería proponer que las partes «se comprometan a acordar un mecanismo de auto composición, previa de conflictos, para evitar medidas de acción directa encubiertas o no, que atentan contra un servicio público clave como es el que presta la compañía».
Precisó que Aerolíneas «propuso analizar una por una las 376 suspensiones aplicadas a empleados de distintas áreas que hicieron abandono de tareas el 8 de noviembre, situación que generó un caos operativo en la compañía, con más de 40.000 pasajeros afectados».
«Sin embargo los gremios, como condición previa a cualquier conversación, decidieron reclamar la eliminación total de esas sanciones, lo que no tiene fundamento jurídico. Y se levantaron intempestivamente de la mesa de negociación y retirándose sin escuchar la oferta salarial», agrega el documento.
El último acuerdo paritario rigió entre el 1 de octubre de 2017 y el 30 de septiembre de este año. Implicó un ajuste inicial de 17% y aumentos posteriores al ritmo de la inflación. A su vencimiento, había representado un aumento promedio de los salarios de todo el personal de la empresa del 34%, con grupos que superaron el 40% -según publica Ámbito-.