Una mujer denunció públicamente a su expareja por violencia de género y mostró esta semana una serie de capturas de pantalla de las transferencias de $ 0,01 vía Mercado Pago que el hombre realizó al sólo efecto de hacerle llegar mensajes agresivos, amenazas e insultos.
«No quería ser otra de las que te dejaba mal en redes, no porque no esté mal lo que haces o porque te defienda, sólo por el amor y respeto que te tenía, pero lo único que recibo a cambio es amenazas y no poder ni salir a la calle por miedo a que te aparezcas como ya lo hiciste«, expresó Ailén en un mensaje que se hizo viral en Twitter.
En una prueba de violencia de género digital, la mujer también compartió el jueves de esta semana las capturas de Whatsapp de su expareja en las que la acusó de ser infiel y donde se refirió a su crianza como excusa para su comportamiento agresivo.
La víctima mostró el perfil de Twitter del muchacho, llamado Santiago Tomás, en el que consta que es de Campana, provincia de Buenos Aires.
En la misma red social otros usuarios se dedicaron al «doxing», que consiste en recopilar y publicar información personal de alguien o de un grupo sin su consentimiento sin importar que pueda dañar su trayectoria pública y profesional.
Con el correr de las horas salió a la luz hasta la empresa para la que trabaja el muchacho, quien sin embargo aseguró que no iría al trabajo con tal de seguir mandando amenazas de $ 0,01 a su exnovia.
A lo largo del día Ailén no sólo logró apoyo de sus seguidores sino también la respuesta de Mercado Pago, que se puso a su disposición, así como los testimonios de otras víctimas de violencia de género, incluida la de una expareja del mismo hombre, con quien tiene una hija.
«Realmente me da miedo que pueda llegar a pasarme algo despues de subir todo esto, pero ojala queden las pruebas de todo», escribió a última hora Ailén, quien explicó a uno de sus seguidores que la madre de la hija de su exnovio «es otra a la cual la trató igual o peor que a mí, y yo sólo le creía a él que ella era la loca y tóxica».
Además de la acusación pública por violencia de género y violencia digital, Ailén mostró sus pruebas a la Policía al hacer la denuncia correspondiente.