El accidente, ocurrido hace tres años atrás, pasadas las 22 horas cerca del Instituto Provincial Penitenciario, se cobró la vida de dos niñas, su padre y la hermana de este, dejando una estela de dolor y preguntas sin respuesta, indica El Caletense.
El automóvil en el que viajaban, un Volkswagen Gol, circulaba en dirección a Puerto Madryn cuando impactó de frente contra una camioneta pick-up conducida por Walter March, un empresario hotelero que se dirigía a Trelew. March, único ocupante de la camioneta, sufrió una fractura expuesta de tobillo y fue trasladado de urgencia al Hospital Isola de Puerto Madryn.
Tras conocerse la tragedia, la madre de las niñas, oriunda de Chubut pero radicada en Santa Cruz, se trasladó a Puerto Madryn para enfrentarse al desgarrador proceso de identificar a sus seres queridos y comenzar una batalla por justicia que, a tres años del hecho, sigue sin resolverse.
“No fue un accidente”: la búsqueda de justicia
Para la madre de las víctimas, este no fue un simple accidente. Walter March, quien continúa en libertad, es señalado como responsable directo del choque. Según las palabras de la madre, “esto no fue un accidente, vos sos la causa. Sos un asesino al volante”. La indignación y el dolor de quien perdió a sus hijas, a su pareja y a una cuñada no han encontrado alivio en el lento accionar de la justicia.
La mujer expresó su frustración en redes sociales con un contundente mensaje: “Duele… duelen las víctimas, los que podrían haber sido y no fueron. Duele el tiempo y los olvidos”. En sus publicaciones, critica el sistema judicial y denuncia la falta de avances en el caso, etiquetándolo como “homicidio doblemente agravado por el número de víctimas”.
A tres años de la tragedia, la madre continúa enfrentándose a la ausencia de respuestas, mientras el principal acusado lleva una vida aparentemente normal. La mujer relató su encuentro con March en un gimnasio local, donde compartieron espacio: “No puedo creer lo lenta es la justicia. Me supera”.
La causa judicial, etiquetada como “Caso García”, parece estar “dormida”, según las palabras de la madre. La falta de resolución y el sentimiento de impunidad agravan su duelo, mientras sigue exigiendo que el caso avance y que el responsable enfrente las consecuencias de sus actos.
Fuente: El Caletense