El 29 de marzo del 2017, una intensa lluvia marcaba el inicio de lo que sería el peor temporal de la historia de la ciudad desde que existen registros, con un saldo de cientos de casas afectadas y miles de evacuados. Aún siguen sin registrarse obras de magnitud que impidan que un episodio de similares características ocurra nuevamente.
Un miércoles común en Comodoro Rivadavia se convirtió, de un momento al otro, en una pesadilla repetida debido a la cantidad de lluvia caída en un corto lapso de tiempo. Tal como en 2010 y 2012, pocos minutos bastaron para que, a las 18hs, las intensas lluvias anegaran las calles de la ciudad, formando ríos que arrastraron piedras, basura y hasta vehículos en su paso.
A poco de finalizar la primera gran lluvia, el panorama se vio repetido a lo largo de una semana, donde las incesantes precipitaciones no dieron tregua y colapsaron por completo la ciudad, afectando miles de viviendas y negocios, obligando también a la evacuación de decenas de miles de personas.
«El temporal del 2017», como se lo recuerda en la actualidad, dejó un saldo de dos muertos y casi 100 mil evacuados. Aunque en infraestructura, las consecuencias siguen visibles y nada parece haber cambiado desde entonces.
Tras la pérdida de cientos de hogares, que fueron arrastrados -literalmente- por el agua y otros inundados hasta quedar irrecuperables, se puso a disposición módulos habitacionales para las familias que quedaron con lo puesto. Aquellas personas al día de hoy siguen viviendo en el mismo lugar ante la falta de alternativas y el abandono por parte de las autoridades.
«El primer estudio técnico para analizar las obras hídricas necesarias y urgentes se anunció el 22 de mayo de 2017. Hubo fondos millonarios. No hubo proyectos», resalta ADataSur, agencia que realiza un seguimiento día a día de los «avances» de las obras de reparación de la ciudad.
«La urgencia de un nuevo Código de Planeamiento Urbano se expresó en abril de 2017. En mayo era ‘el 1° objetivo’. Hubo borrador elaborado en 2018. Nunca tuvo tratamiento final. Este año, la Municipalidad de Comodoro Rivadavia se auto-reclamó que salga ‘de una vez por todas'», amplian.
Además, detallan que «La primera denuncia por irregularidades en compras, contrataciones y destinos de donaciones se realizó el 5 de septiembre de 2017. Luego, Gastos de Emergencia en octubre de 2017 y formalizada en mayo de 2019. Hoy, todo en stand-by obligado».
Por otra parte, el camino Juan Domingo Perón que une Comodoro con Rada Tilly, fue abruptamente «cortado en dos» por el arroyo La Mata, que aumentó su caudal de manera impresionante e incontenible, llevándose por delante parte del camino alternativo para llegar a la localidad balnéaria. A tres años de su cierre, tras varias licitaciones fallidas para su reparación, la obra parece nunca iniciar.
A tres años de la catástrofe que marcó a Comodoro y sus habitantes, se sigue sin realizar las obras de consideración necesarias para impedir que un episodio así se repita.