La nueva dirigencia de Boca llegó para renovar el club, y no solo desde el área futbolística, sino también al mítico estadio Xeneize. El reemplazo del acrílico que separaba a la platea L del campo de juego por una fosa, la quita de butacas para transformar un sector de la platea K nuevamente en popular y una mano de pintura en el exterior son algunas de las obras que se llevan a cabo en el Alberto J. Armando.
Piel nueva
Esa fue la primera idea de la dirigencia para la renovación de La Bombonera de cara al año 2020. Y así fue: tras un convenio con las empresas Sinteplast y Piccolo, el estadio recibirá una nueva imagen. Estará pintada de una franja azul, una amarilla y otra azul, formando así la bandera del club.
Mejor visión para la platea baja
Tras años de reclamos por parte de los abonados a la platea L, que se encuentra en la primer bandeja del sector central de la cancha, frente a los palcos y la platea preferencial, la dirigencia decidió quitar el acrílico que separaba a dicha tribuna con el campo de juego, para reemplazarlo por un foso de –estiman- 70cm, donde iría personal de seguridad privada.
Mientras, también sacaron el acrílico de la tercera bandeja sur, donde –hasta el momento- se ubican los socios adherentes de Boca. La histórica tribuna visitante, cuando estaban permitidos, ahora contará solo con un alambrado para que los hinchas Xeneizes tengan una mejor experiencia durante el partido.
De vuelta popular
Mientras, la ahora llamada platea K –tercera bandeja norte-, que se encuentra por encima de la famosa “tribuna de la 12” o Natalio Pescia, volvería a ser popular, aunque por el momento la obra se lleva a cabo por etapas. Esta semana, fueron quitadas unas 500 butacas del sector, reacomodando en otros sectores a los abonados que frecuentaban dicha tribuna.