El juez Esteban Rossignoli dispuso la tarde de este lunes 16/03 convertir en detención la aprehensión de Miguel Ángel Paz, el hombre que regresó de viaje y agredió a golpes a un vigilador del edificio en el que vive, en Olivos.
El presidente Alberto Fernández ya se lo había advertido, que él «personalmente» se encargaría de que recibiera su merecido «por loco», y ahora, Miguel Ángel Paz, de 40 años, quien agredió física y verbalmente al portero de su edificio, quedó formalmente detenido.
El agresor declaró este mediodía ante el fiscal Martín Gómez de la UFI de Vicente López Este y admitió que violó el aislamiento impuesto por el Gobierno tras regresar de un viaje a Estados Unidos, y que lo hizo «por un problema familiar». Sus dichos convencieron al fiscal, que le ordenó prisión domiciliaria, pero el juez Rossignoli no lo perdonó y dijo que su detención sea en la cárcel.
“Cuando volví de viaje había mucha paranoia en el edificio. Sentí que mi familia estaba asediada por los vecinos. Me entero que el vigilador le había hecho saber al resto de los vecinos que me iba a denunciar. Me enojó esa situación. Lo llamé por teléfono y le pedí que no lo hiciera, que no me denuncie. Se lo pedí bien pero como noté que no me daba pelota decidí bajar para explicarle los puntos (sic)”, fue lo declaró el hombre ante la Justicia.
Además, la indagatoria se hizo por videoconferencia para preservar la salud del fiscal, comenta URGENTE24.
Por el incumplimiento del decreto, el preparador físico podría afrontar hasta 2 años de prisión.