«Me llamo Diego Armando por él», es una frase que podrían decir 12.370 argentinos. Es tan solo una de las maneras de medir la relevancia de Diego Armando Maradona, fallecido el 25 de noviembre a los 60 años.
Hubo tres años en los que los padres y madres argentinos decidieron inscribir a sus hijos con el nombre Diego Armando, según los datos provistos por el Registro Nacional de las Personas (RENAPER).
En 1981, año en el que salió campeón con Boca, 1.326 recién nacidos recibieron su nombre.
En 1986, cuando ganó el Mundial de México con la selección argentina, 1.174 bebés recibieron su nombre.
En 1991, un año después del segundo puesto logrado en el Mundial de Italia 1990, 942 argentinos fueron inscriptos con su nombre.
Por último, en 2013, años después de su retiro y ya en su etapa de técnico, Diego Armando resurgió y 267 recién nacidos fueron inscriptos con su nombre.
Fuente: a24.com