¿La represión policial contra los Camioneros fue para tapar la violación del menor?

Después que el juez Faiella Pizzul confirmará que en ningún párrafo de su resolución ordenaba desalojar ni reprimir, surge con fuerza la hipótesis que el desmedido accionar policial en el desalojo de los Camioneros buscaría…

domingo 22/01/2012 - 10:30
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Después que el juez Faiella Pizzul confirmará que en ningún párrafo de su resolución ordenaba desalojar ni reprimir, surge con fuerza la hipótesis que el desmedido accionar policial en el desalojo de los Camioneros buscaría ocultar la aberrante violación de un joven de 16 años.

Al menos seis de los diez uniformados que fueron detenidos acusados del presunto delito de violación a un joven de 16 años en la seccional segunda de la policía del Chubut con asiento en Trelew, resultaron identificados por la víctima.

Así lo expusieron los padres del adolescente, Fernando Almonacid y Estela Alvarado, tras la rueda de reconocimiento que se realizó en la sede judicial, mientras esperaban la audiencia de control de detención en el tercer piso de tribunales y que se demoró por cuestiones de organización.

El padre del joven explicó que «mi hijo estaba enfrente de mi casa junto con su novia y otros amigos del barrio cuando fue detenido el miércoles por la policía sin ninguna razón según me dicen los vecinos y los propios chicos».

«La detención se produce alrededor de las 7, un rato después que yo me fui al trabajo ya que entro a las 6 de la mañana», explicó en diálogo con Télam, que se hizo entrecortado ya que el padre lloraba al pensar que «si no van mi esposa y mi hijo lo matan».

El joven fue liberado a las dos horas de haber ingresado a la comisaría «totalmente mojado, suponemos para lavar cualquier rastro, golpeado y hecho un desastre» y si bien primero cuenta que «solamente» lo golpearon, luego revela que le introdujeron el bastón policial en el ano.

La familia Almonacid vive en el humilde barrio Presidente Perón de Trelew, sobre el pasaje San Luis Norte al 243.

«Mi hijo tuvo los huevos de contar lo que pasó y yo sólo pido justicia»,
dijo desconsolado Almonacid quien se preguntó: «¿Cuántos pibes se habrán matado luego de esto, cuántos suicidios ocurrieron después de semejante humillación?».

El hombre reconoció que el gobernador Martín Buzzi envió gente de su entorno para ponerse a disposición por lo que «simplemente les transmití que hagan justicia, los quiero ver presos, en la cárcel, a mi no me alcanza con que los hayan pasado a disponibilidad o que los dejen cesantes» a los policías involucrados.

Viculación de hechos policiales
El gobernador Martín Buzzi echó del cargo al ex jefe de la policía del Chubut, Néstor Siri, y puso en su reemplazo ayer al comisario general retirado Lucas Sivila.

Buzzi, en diálogo con esta agencia de noticias, no descartó que «este episodio y el ocurrido hace unos 15 días en Comodoro (en que un joven fue baleado desde un patrullero) tengan vinculación, no quiero pensar mal pero la verdad es que todo es muy raro».

«Tenemos que recuperar la cadena de mandos en la policía porque la fuerza pública tiene que estar al servicio de los ciudadanos» indicó.

El mismo miércoles en que el joven denunció haber sido violado en la seccional segunda, la policía se enfrentó con una manifestación del gremio de los camioneros que terminó con heridos, contusos y varios vehículos dañados.

Las especulaciones que se hicieron no desvinculan a un hecho del otro y se sospecha que la exagerada represión policial de la seccional segunda fue para «tapar» o desviar la atención pública sobre el otro episodio que se desconocía.

El propio ministro de Gobierno y Justicia, Javier Touriñán, dijo que «yo escuché esa versión y no estoy en condiciones de confirmarla porque mi rol institucional me obliga a mantener mis dichos en base a las pruebas, pero tampoco puedo descartarlo».

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