Así lo indicó el presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Matías Furió, quien señaló que «las ventas de Reyes explican el 30% de las de fin de año» para ese sector.
Las ventas de juguetes para Reyes registraron una leve suba del 0,5 por ciento este año con relación a las de 2017, aunque se vieron perjudicadas por las lluvias que se registraron el pasado viernes.
Así lo indicó este sábado el presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete, Matías Furió, quien señaló que «las ventas de Reyes explican el 30% de las de fin de año» para ese sector.
«Si bien había buenas expectativas, el clima del viernes 5 de enero, día en el que se concentra la mayor venta de la semana, no ayudó debido al temporal registrado en la región metropolitana y el Gran Buenos Aires, región que explica la mayor densidad de comercios», señaló el dirigente sectorial.
En cambio, en el interior del país, donde el clima estuvo más estable, las ventas tuvieron un mejor desempeño.
El ticket promedio de juguetes se ubicó en torno a los $240 y se aprovecharon las promociones y descuentos con las tarjetas de crédito en especial el Programa Ahora 3 y 6 que, tras «intensas negociaciones en conjunto con la Secretaría de Comercio de la Nación y las compañías emisoras de tarjetas de crédito, la Cámara logró incorporar de manera definitiva a los juguetes y juegos de mesa de industria argentina».
La posibilidad de haber contado con el programa de pago en cuotas permitió incrementar las ventas de los numerosos pequeños comercios minoristas al poder ofrecer un esquema de financiamiento más atractivo y muy demandado por el consumidor final.
En este caso, las ventas con Ahora 3 y 6 explicó el 80% del total de las operaciones realizadas con tarjetas de crédito.
Furió afirmó que las ventas de la temporada del Día de Reyes Magos están posibilitando cerrar un buen año para la industria: «Hemos logrado mantener la participación del 51% de la industria nacional en el mercado argentino del juguete en un contexto de incremento de las importaciones en el orden del 30%.
Tras la crisis del 2001, teníamos una participación marginal del 3%».
«La industria argentina del juguete en los últimos años se ha reconvertido alcanzando altos niveles de competitividad a partir de la incorporación de tecnología y maquinaria de última generación, lo que permitió incrementar la productividad y ofrecer nuevos lanzamientos con diseño y calidad», destacó.
