Cinco detenidos incomunicados, algunos de ellos traídos desde el conurbano bonaerense y de Puerto Madryn, un «puntero» comodorense y otro sujeto oriundo de esta ciudad pero que operaba desde Buenos Aires, más el secuestro de unos 10 kilos de marihuana, armas de fuego y hasta una flotilla de vehículos de alta gama que estaban acondicionados con doble fondo para el transporte de los estupefacientes, es parte del trabajo investigativo que durante tres meses y medio llevó adelante la Brigada de la Delegación local de la Policía Federal Argentina bajo estrictas órdenes y supervisión de la dra. Eva Parcio de Seleme, titular del Juzgado Federal de primera instancia de esta ciudad, quien contó con la estrecha colaboración de sus secretarios penales Mazzuco y Gutiérrez.
Si bien persiste el secreto de sumario y los detenidos se encuentran alojados en diversas dependencias policiales de la zona y los dos más comprometidos en la causa, en la Delegación de la Policía Federal de esta ciudad, trascendió que de la investigación se ha podido establecer que los operativos realizados en los últimos días tanto en las localidades bonaerenses de San Nicolás y Ramallo y en Puerto Madryn, han traído a los últimos cinco detenidos, entre ellos el «cabecilla», un individuo de unos 50 años que cuenta con captura internacional por un tráfico de 500 kilos de droga supuestamente enviada a Europa.
En todos los operativos, los efectivos de la Brigada local de la Policía Federal contaron con la colaboración de Divisiones operacionales de la misma fuerza en cada localidad.
Se trataba de una banda que se encargaba de enviar grandes cantidades de clorhidrato de cocaína y «panes» de marihuana compactada a diversas localidades del sur del país, entre ellos Puerto Madryn y esta ciudad.
Cabe destacar que en el marco investigativo que conlleva unos tres meses de investigación, se debieron implementar numerosas escuchas telefónicas, digitalización de imágenes, filmaciones y utilización de medios técnicos especiales para la detección y recopilación de datos de interés para la causa judicial.
No se trataba de una banda improvisada ya que, según las fuentes policiales, secuestraron armas de fuego, vehículos de alta gama y más de cincuenta teléfonos celulares puesto que cada integrante solía manejarse con media docena de esos teléfonos para evitar las escuchas telefónicas que eventualmente ordenara la Justicia que podría investigarlos.
Hay otras tareas policiales aún en proceso, y estarían a la espera de la detención de otro individuo que momentos antes de comenzar los allanamientos logró huir en un costoso vehículo.
Los «punteros» locales
Se informó asimismo que la banda contaba con una especie de «ejército» de «punteros» que se encargaban de la distribución, y entre ellos había un sujeto de esta ciudad que está detenido e incomunicado y que hace pocas horas debía recibir un importante cargamento, pero por cuestiones que no trascendieron, el pasado viernes 27 de mayo debieron precipitar los acontecimientos y realizar un viaje relámpago a Puerto Madryn y actuar con suma celeridad con parte del positivo resultado antes descripto.
Fuente: Diario Crónica
